Buenos
Aires - Estados Unidos, Europa y Japón suman 75 millones
de personas afectadas por la osteoporosis. En la Argentina
sabemos que 1 de cada 4 mujeres postmenopáusicas presenta esta
patología y que 2 de cada 4 tienen osteopenia, un estadío
previo a la osteoporosis.
Aunque muchas personas
creen que la osteoporosis es una -etapa más de la vida- o una
consecuencia del paso de los años y de la degeneración de los
huesos, lo cierto es que, tal como explican los especialistas,
esta condición puede prevenirse.
Esto es clave porque
dado que la expectativa de vida va en aumento, y teniendo en
cuenta que la osteoporosis suele desarrollarse después de la
menopausia, trabajar sobre los factores que pueden mejorar el
pronóstico es clave, para evitar que la incidencia de esta
condición aumente.
"La
prevención de la osteoporosis parte de los hábitos de
conducta. Los buenos hábitos de vida son la clave. Esto quiere
decir que para tener huesos sanos, es recomendable llevar
adelante una dieta equilibrada, que contemple la inclusión
adecuada de lácteos, vitamina D -adquirida en forma natural a
través de la exposición solar en horarios y tiempos
recomendados y, si no fuera posible, a través de suplementos-,
así como también el mantenimiento de un peso adecuado. Por
otro lado, es importante no fumar ni tomar alcohol en exceso,
además de restringir la ingesta de gaseosas y café. Por
último, hay que contemplar la realización de actividad física
de todo tipo. Todas estas instancias hacen a una vida
saludable", expuso al ser entrevistada por PRO-SALUD
News la doctora Zulema Man, médica especialista en
Endocrinología, Medicina Nuclear y Osteología, miembro
fundador de la Sociedad Argentina de Osteoporosis
(SAO).
En cuanto a este último punto la
especialista, también directora Médica del Centro TIEMPO y de
los Cursos de posgrado en Osteología de la Universidad
Favaloro, comentó: "Lo ideal es realizar ejercicios que
combinen actividades aeróbicas, caminatas, bicicleta o
natación, siempre teniendo en cuenta las limitaciones propias
de la edad. Universalmente se recomiendan el Tai Chi Chuan y
el aqua gim, ya que permite adquirir mayor equilibrio y
reflejos, en el primer caso, y mayor agilidad en el
segundo".
No
obstante, al margen de todas estas medidas, la doctora Man
indicó que al comenzar la menopausia todas las mujeres deben
someterse a una densitometría ósea, un estudio que mide el
"capital óseo", y que por ende ayuda a los especialistas a
determinar si es necesario realizar o no un tratamiento
correctivo.
"En esta instancia hay que tener en
cuenta el historial de fracturas previas, sobre todo de cadera
en familiares de primer grado, así como también la existencia
de trastornos de mala absorción intestinal, o el historial de
utilización de corticoides por períodos prolongados, etc",
expuso la especialista.
"Aún en caso de requerir
un tratamiento correctivo, mantener la adherencia a éste y
mejorar los buenos hábitos cotidianos favorecen la disminución
de las fracturas y aseguran una mejor calidad de vida", añadió
Man.
Los tratamientos
La osteoporosis
es una enfermedad crónica y debilitante en la cual los huesos
se van volviendo "porosos" y por ende corren más riesgo de
fracturarse. Cuando los hábitos para la prevención no fueron
los adecuados, o cuando el daño ya progresó y es necesario
realizar un tratamiento correctivo, hay diversas
opciones.
"Si bien existen tratamientos para la
osteoporosis desde hace aproximadamente 30 años, hay muchos
estudios adonde se evidencia que los pacientes no cumplen en
forma correcta con los esquemas indicados. En Argentina, la
adherencia al tratamiento ronda el 50 por ciento, lo que
evidentemente reduce la eficacia de los mismos", señaló la
especialista.
"Cada grupo de moléculas que existe
para el tratamiento de la osteoporosis tiene diferente
mecanismos de acción. Los tratamientos estándar más utilizados
en nuestro país y también en el mundo, son sustancias que se
adhieren al hueso y actúan inhibiendo la acción del
osteoclasto (la célula destructora del hueso o la célula que
produce la 'pérdida'), de manera que cuando el osteoclasto
comienza a 'destruir' el hueso, son incorporadas dentro del
mismo y por toxicidad anulan la actividad de esta célula",
remarcó la doctora Man.
En este sentido,
recientemente se presentó una nueva opción. Se trata de
denosumab perteneciente al laboratorio GlaxoSmithKline (GSK)
que actúa de manera diferente, ya que "ataca" el RANK Ligando
(RANK-L), un regulador esencial de los osteoclastos que
protege al hueso con un mecanismo similar al
fisiológico.
"Otra de sus características es que,
a diferencia de otras medicaciones que se administran por vía
intravenosa u oral, ésta nueva opción incrementa la adherencia
ya que se aplica cada seis meses mediante una inyección
subcutánea", completó la
especialista.
Número de matrícula del
especialista consultado:
- Dra. Zulema Man: M.N.
35.037