El Ministerio de Salud, desde el servicio de nefrología del hospital
Notti, trabaja en la prevención de la enfermedad, con motivo de haberse
conmemorado el 19 de agosto el Día Nacional de la Lucha contra el Síndrome
Urémico Hemolítico”.
Por este motivo, brinda una serie de recomendaciones para evitar contraer
este síndrome que es una enfermedad causada por una bacteria productora de
una toxina, que suele estar presente en los alimentos y en el agua.
Argentina presenta la incidencia más alta en el mundo del síndrome urémico
hemolítico y representa la segunda causa de trasplante renal pediátrico en
nuestro país. La enfermedad es transmitida por alimentos contaminados con
una bacteria llamada Escherichia coli, la cual libera una toxina que
produce lesiones en los pequeños vasos sanguíneos de los diferentes
órganos.
Esta bacteria ingresa al organismo por la ingesta de carne (especialmente
mal cocida) o por otros alimentos que hayan estado en contacto con la
materia fecal de la vaca, como leche no pasteurizada, verduras y frutas
mal lavadas o aguas contaminadas. La manipulación de alimentos y la
cocción de carnes se convierten en primeros detonadores de esta
enfermedad.
Esta enfermedad suele afectar principalmente a niños de 6 a 36 meses,
aunque otras edades también pueden contraerlo.
Formas de detectarlo
Se detecta cuando aparecen síntomas como diarrea con o sin sangre en
niños previamente sanos. Luego, suelen lucir pálidos porque se bajan los
glóbulos rojos (anemia hemolítica). Los riñones empiezan a fallar en su
trabajo para eliminar sustancias tóxicas y en algunos casos el paciente
deja de orinar (insuficiencia renal). En casos más graves, también se
pueden afectar otros órganos, como el corazón o el sistema nervioso.
Una vez contraída la enfermedad, no tiene tratamiento específico sino
sólo de sostén, por lo tanto prevenir es la única herramienta viable para
evitar el Síndrome Urémico Hemolítico.
¿Cómo se transmite?
Las personas pueden contraer esta bacteria de alimentos contaminados, como
carne picada de vaca y aves sin cocción completa como las hamburguesas,
salame, arrollados de carne, leche sin pasteurizar, productos lácteos
elaborados a partir de leche sin pasteurizar, aguas contaminadas, lechuga,
repollo y otros vegetales que se consumen crudos.
También se puede producir el contagio de persona a persona por prácticas
higiénicas inadecuadas. Otra vía de contagio es a través de aguas de
recreación.
¿Cuáles son los síntomas?
El SUH puede presentarse a través de síntomas como diarrea, dolores
abdominales, vómitos y otros más severos como diarrea sanguinolenta y
deficiencias renales. La complicación de la enfermedad afecta
particularmente a niños, ancianos y aquellos que, por padecer otras
enfermedades, tienen su sistema inmunológico deprimido. En algunos casos,
puede provocar la muerte.
¿Cómo puede prevernise?
• Higiene durante el faenamiento del ganado.
• Aplicación de controles en los puntos críticos de la elaboración de
alimentos.
• Lavado cuidadoso de frutas y verduras.
• Cocción de los alimentos a temperaturas que aseguren la destrucción de
la bacteria.
• Evitar la contaminación cruzada en la elaboración de las comidas.
• Higiene personal.
• Evitar el hacinamiento en comunidades cerradas (jardines maternales,
jardines de infantes, cárceles, etc.).
• No concurrencia a comunidades cerradas de personas con diagnóstico
bacteriológico positivo.
• Evitar el uso de antimicrobianos y antidiarreicos, considerados factores
de riesgo en la evolución de diarrea a SUH.
Otras medidas de prevención
Lavado de manos y alimentos:
Las manos deben lavarse con agua tibia y jabón; especialmente antes de
comer o de procesar alimentos o carne cruda, luego de ir al baño o
cambiar pañales.
No permita que le expendan el pan sin guantes o luego de haber manipulado
dinero.
No compre huevos que tengan su cáscara rota o sucia.
Respetar la cadena de frío de los alimentos:
Respetar la cadena de frío de todas las carnes.
Los productos lácteos pueden contaminarse a partir de otras fuentes y así
transmitir la enfermedad. Siempre debemos consumir productos
pasteurizados.
Un alimento fresco puede permanecer como máximo 2 horas a temperatura
inadecuada (4-60º).
Al realizar las compras, comience por los productos envasados y deje para
el final los perecederos como carnes, aves, pescados o productos lácteos.
Si compra carne picada, prefiera la que fue procesada en el momento y
consúmala inmediatamente. Recuerde que este producto se alterará más
rápidamente que una pieza de carne entera.
Controle las fechas de vencimiento de todos los productos.
No compre alimentos preparados que se exhiban a temperatura ambiente.
No vuelva a congelar un alimento que ya fue descongelado, pues ello
favorece la contaminación con microorganismos y su posterior
proliferación. Descongele el producto en la heladera y no a temperatura
ambiente, ni lo aproxime a una fuente de calor o bajo el chorro de la
canilla. Asegúrese de que, antes de cocinar el alimento, se haya
completado su descongelación, sobre todo cuando se trata de piezas
grandes.
Una vez que se cocinó el alimento consumirlo lo antes posible. Las sobras
deben ser consumidas dentro de los 3 días.
Guardar los alimentos correctamente:
Evitar colocar carne en los estantes superiores de la heladera de modo de
prevenir que se derrame su jugo sobre otros alimentos.
No guardar alimentos crudos juntos con cocidos
Considerar que los productos en la puerta de la heladera están a mayor
temperatura.
Al abrir una lata de conserva, transfiera todo el contenido a un envase de
vidrio o de plástico. Nunca conserve el excedente en el envase original
(lata).
Asegurar la correcta cocción de la carne:
La bacteria se destruye a 70º. Ésto se consigue cuando la carne tiene una
cocción homogénea (cuando no quedan partes rojas).
Tener especial atención con la cocción de la carne picada, ya que
generalmente se cocina bien sólo la parte superficial.
Correcta manipulación de alimentos:
Utilizar diferentes cuchillos para cortar la carne cruda y la cocida para
no arrastrar bacterias de una a la otra.
Evitar el contacto de las carnes crudas con otros alimentos.
Luego de cortar carne cruda, lavar cubiertos, utensilios y superficies de
corte (tablas, mesadas) con agua y detergente
Lavado adecuado de frutas y verduras con agua potable y de no ser posible
con el agregado de 2 gotas de lavandina por litro esperando 30 min antes
de utilizarla
No guardar yogures o derivados consumidos parcialmente
Consumir agua potable. Ante la duda hervirla.
Respetar la prohibición de no bañarse en aguas contaminadas